Un mercado lleno de vida

Fundado en 1981 como respuesta a los agricultores para vender una parte de la producción agrícola de la denominada comarca Tacoronte-Acentejo.

El Mercadillo se ha ganado una posición sólida en la isla. Cuenta con una clientela fiel y con un compromiso firme por parte de los productores, que planifican sus cultivos atendiendo a la demanda.

Desde siempre se ha cuidado el vínculo directo entre agricultor-consumidor

de forma que los precios en el mercadillo son muchas veces inferiores a otros que ofrecen otros puntos de venta de la isla. En algún momento, esta fue la razón por la cual, se llegó a acusar al mercadillo de competencia desleal por parte de colectivos comerciantes de la zona, cosa que muchísimos consumidores y socios del mercadillo negaron, puesto que los clientes del mercadillo son fijos y siempre vienen para comprar los mismos productos que no consiguen en otros mercados o puntos de venta.

Con sus más de 30 años de historia cada fin de semana el Mercadillo del Agricultor de Tacoronte renueva su vitalidad y se reafirma claramente en el dinamismo comercial que le acompaña desde su fundación, un espacio vitalista que se distingue por acercar a productores y consumidores. Con una media de 6.000 visitantes distribuidos entre el sábado y domingo en los periodos de mayor agilidad comercial, si bien en los últimos tiempos y bajo el influjo de la arraigada crisis se palpa una considerable merma en el volumen global de ventas y en número de clientes.

El primer Mercadillo del agricultor de Tenerife:

El Mercadillo del Agricultor de Tacoronte surgió tras un periodo de estudio y de consultas. Llegó por iniciativa de un grupo de agricultores tutelados por la Agencia de Extensión Agraria de Tacoronte.  Nos inspiramos en el ejemplo que daba el municipio grancanario de la Vega de San Mateo donde un grupo de agricultores y ganaderos había impulsado la creación de un mercadillo agrario, el primero que se creaba en Canarias.

Lo cierto es que hoy por hoy el Mercadillo funciona con agilidad y transparencia. Se ha consolidado como uno de los espacios de referencia insular, un elemento dinamizador de la economía municipal y comarcal, que genera tanto de manera directa como indirecta incentivos de gran importancia para el municipio. Más de medio centenar de agricultores y ganaderos tienen en el Mercadillo su fuente principal de ingresos. Al cabo de los años se han ido adecuando las producciones respecto a la demanda que el público manifiesta, entre productores-vendedores se ha generado una eficaz comunicación que nos lleva a planificar y modernizar los cultivos.